Como ya te conté en instagram, siempre que estamos en la Cerdanya intento hacer una escapadita al mercado de los sábados en Llívia. No es un mercado grande, hay dos paradas, la que llena todo el recinto es la que me encanta por que esta abarrotada de mil variedades de verduras y frutas, algunas bastante atípicas, calabacines amarillos, alcachofas gigantes, berenjenas minis, brócoli púrpura…todo lo que venden es de proximidad, de la zona, del Rousillon, y gran parte es de producción…